Aunque Eslovaquia ha desarrollado muchísimos tipos de turismo, la mayoría de todos los que podemos encontrar en el territorio europeo, uno de los más interesantes es, sin dudas, el relacionado con los balnearios termales, sobre todo si consideramos que se trata de una alternativa que ha presentado un gigantesco crecimiento en los últimos años.
De hecho, la clave para entender la explotación de estos sitios a nivel nacional, es que el territorio de Eslovaquia ha sido favorecido por la naturaleza, con la existencia de una especie de mar subterráneo debajo del mismo, de modo que al ir descubriéndose posibles salidas de estas aguas, el negocio está servido.
Por este motivo, y considerando que allí las aguas medicinales brotan en cientos de manantiales de aguas termales a la superficie, todas las cuales luego son rodeadas por perfectas instalaciones y todo el merchandising lógico del caso, permiten a la larga que miles de turistas disfruten de estas virtudes eslovacas, inigualables en otros sitios de Europa.
Actualmente, y de acuerdo a las estadísticas nacionales, en Eslovaquia podemos encontrarnos con 1.300 fuentes medicinales, las cuales funcionan a su vez en hasta 22 balnearios, con la enorme ventaja de que la mayoría de las regiones del país poseen los suyos propios, por lo que podemos disfrutarlos allí donde estemos.
Vía: Eslovakia
Imagen: Sobre Austria