Conocer cada rincón de Eslovaquia ciertamente cautivará tus sentidos y despertará vuestras intenciones de regresar aquí. Este país, posee una gran cantidad de encantos, muchos de ellos históricos, en lo que respecta a castillos y demás instituciones, mientras que otros son obra de la naturaleza y de la cultura eslovaca.
En esta oportunidad, la Iglesia de San Esteban, es uno de los tantos rincones que ameritan ser visitados. Pues en este pequeño rincón, la belleza yace en la sencillez y la sobriedad. Aunque su aspecto no es llamativo, la esencia, sí lo expresa.
En este sentido, la Iglesia de San Esteban, es una parroquia perteneciente a la Orden de los Monjes Capuchinos. Su ornamento no es de lo más pomposo que presenta Eslovaquia, sin embargo, muchos creyentes y religiosos han quedado cautivados con la sencillez y belleza de este sitio.
Una de las recomendaciones para apreciar esta iglesia, es pararse en dirección frontal a ella, así, será posible admirar su inmensidad por completo, apreciando así mismo, el escenario que ofrece el resto de la ciudad de Bratislava.