Una de las cualidades más interesantes del turismo para quienes visiten Europa del Este es, sin dudas su gastronomía. En este sentido, uno de los platos típicos de países como Hungría, Polonia, Eslovaquia y Ucrania es el llamado “Halusky”, un alimento muy similar a la pasta en lo que refiere a su aspecto, particularmente a los famosos Gnocchi italianos, y que en muchas regiones locales está considerado como el plato simbólico.
Hay que destacar que aunque pueden llegar a variar de una zona a otra, la receta de base contiene patata rallada y mezclada con harina, sal y huevo rallado, con los que se hace una masa homogénea. La misma, luego se hace pasar por un tamiz especial con perforaciones de gran tamaño. Los grumos que quedan caen directamente al agua hirviendo que los está esperando, formando una pasta de entre 1 y 3 centímetros, que puede achicarse al cocinarse.
En el caso particular de Eslovaquia, la variedad más común del Halusky es la denominada “Bryndzové”, que podría traducirse al español como “masa pequeña con queso de oveja”. Para mucha gente se trata de la comida nacional del país, y se agrega a la receta mencionada anteriormente el “bryndza”, un queso eslovaco de leche de oveja similar al queso feta. Al servirse caliente, casi siempre va acompañado de tiras de bacon fritas.
La única diferencia saliente que podemos mencionar en relación a la preparación del plato en otros países, es la utilización de este queso, que se añade durante el mismo procedimiento, para que se funda ligeramente y luego al servir las tiras de tocino, que generalmente suelen tener grandes proporciones de carne.
Vía: Wikipedia
Imagen: Slovakia Travel